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Cadenas de transporte

Como definición general, una cadena es un conjunto de eslabones y anillos enlazados entre sí, que sirven para sujetar, estirar y para la transmisión de movimiento en las máquinas. Los eslabones son generalmente metálicos y se entrelazan unos con otros.

En la industria, concretamente para el transporte, una cadena es un componente de la máquina que transmite potencia por medio de fuerzas de tracción, y se utiliza principalmente para la transmisión de potencia y sistemas de transporte.

Se entiende por cadena de transmisión el elemento de la máquina encargado de arrastrar de un punto al otro un movimiento de fuerzas. Es por ello que, se considera un componente fundamental para el correcto funcionamiento de la máquina.

El principal beneficio de las bandas transportadoras es que aceleran la producción y la hacen más sistematizada para obtener mejores resultados a menores tiempos y costes.

Además de la reducción de costes, se aumentan las posibilidades de trabajo en otras áreas para facilitar aún más la producción, mejorando considerablemente la calidad y cantidad del producto final.

¿Para qué sirven?

Los sistemas de transporte por cadenas se consideran más resistentes y duraderos utilizándose para transportar productos a lo largo de la línea de producción. Son adecuados para muchos artículos que normalmente no se transportarían en un transportador por rodillos. Se utilizan en numerosos entornos industriales y comerciales, incluidos almacenes, plantas automotrices y centros de distribución.

Un transportador de cadena se usa principalmente para transportar cargas pesadas. Son fáciles de instalar, requieren un mantenimiento mínimo y se integran fácilmente.

Más información

A continuación, puedes acceder a la tienda online para clientes B2B. 

Nuestras cadenas de transporte

Cadenas de rodillo

Una cadena de rodillos es un elemento de transmisión de potencia. Se trata de una variante particular de una cadena general de transmisión.
Una cadena de rodillos típica consta de dos tipos de eslabones: eslabones interiores y eslabones exteriores. Cada eslabón costa de dos plaquetas (piezas planas en forma de 8 con dos agujeros). Los eslabones interiores se forman con dos placas o bridas interiores unidas por presión a dos casquillos, sobre las cuales giran libremente los rodillos de la cadena.
Los eslabones exteriores se forman con placas o bridas exteriores unidas a dos ejes que se remachan lateralmente una vez incorporados a los eslabones interiores.
El conjunto final de estas piezas, al cual llamamos cadena de rodillos, permite acoplarse con suavidad a un piñón dentado, ejerciendo una función de transmisión, entre ejes que pueden estar muy alejados, siendo esta una de las principales ventajas de este tipo de cadenas.

Cadenas de charnela

Las cadenas de charnela ofrecen grandes ventajas en el transporte de toda clase de materias, gracias a sus excelentes superficies planas resistentes al desgaste, generando poco ruido en su funcionamiento.
Este tipo de cadenas se utilizan en el sector de la alimentación: botellas, latas, etc.
Son ideales para las industrias de bebidas, vidrio, alimentos, farmacéutica y pintura. Los campos de aplicación típicos son el transporte de botellas, latas o pequeñas cajas de cartón en el área de alimentación y de interconexión.
Las cadenas de charnela son perfectas para realizar rutas tridimensionales complejas sin puntos de separación y transiciones con un transportador. Debido al impulso positivo, no se desliza y, por lo tanto, es adecuado para ambientes húmedos.

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